El Método AVIVA® Para un sistema reproductivo saludable

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¿Te es difícil imaginar los ciclos sin problemas, sin dolores menstruales? 

Si no es así, tienes suerte. Si es que sí, puedes recurrir a diferentes remedios que ayudan a nuestro organismo. Uno de ellos es el Método AVIVA, que consiste en una serie de 18 ejercicios físicos parecidos a una mezcla de baile y gimnasia desarrollados de una manera especial. 

¿Cómo pueden estos ejercicios ayudar a nuestro cuerpo y sistema hormonal tan efectivamente?

Al realizar esta serie de movimientos continuos, el flujo sanguíneo se triplica en la zona de la pelvis. Con esto los órganos reproductivos y los otros órganos cercanos al área de la pelvis (la vejiga, parte de los intestinos) obtienen más vitaminas, hormonas, nutrientes y oxígeno. A la vez, la desintoxicación se vuelve más rápida. 

Además, los ejercicios estimulan la glándula pituitaria (hipófisis), las glándulas reproductivas, la tiroides y los puntos de acupresión correspondientes en las palmas de las manos y en los pies.

Su efectividad reside en aumentar el flujo sanguíneo en la zona de la pelvis y en estimular la hipófisis. Con la comunicación entre la hipófisis y las glándulas, a través del flujo sanguíneo, se puede alcanzar y mantener un nivel hormonal equilibrado. 

Hace 50 años Aviva, Gabriella Steiner, una húngara, ex bailarina clásica, descubrió que algunos ejercicios de su gimnasia podían causar menstruación en caso de mujeres en la edad de la menopausia. Como siempre, había estado interesada por qué no se puede controlar el ciclo menstrual, ella siguió con sus estudios de anatomía y fisioterapia y bailes nativos de fertilidad. A través de su investigación y aplicación durante 28 años ella desarrolló el Método Aviva conocido y practicado hoy.

¿En qué puede ayudar el Método?

Según las experiencias de los últimos 20 años desde que Lívia Tóth trajo el Método a Hungría de Israel es lo mejor en regular el ciclo menstrual y reducir los dolores menstruales. Además, es muy potente ayudando a superar los problemas ginecológicos, cómo el síndrome del ovario poliquístico, endometriosis, mioma uterino u ovario cístico.

Es considerablemente efectivo en incrementar la fertilidad de forma natural. Los ejercicios estimulan la ovulación, abren las trompas de Falopio estrechas y bloqueadas y aumentan la oportunidad de la fecundación, aunque alguien tenga más de 35 años. Por eso puede ser un remedio último para las parejas que buscan un bebé desde hace un tiempo sin éxito. Igualmente podemos utilizar en (o mejor antes de) el proceso de FIV porque es capaz de fomentar el porcentaje de éxito. 

Así mismo, después de un aborto involuntario, puede servir para la recuperación del organismo y prepararlo para un nuevo embarazo. Con el fortalecimiento del útero podemos disminuir el riesgo de otro aborto involuntario. 

Otra área en la que puede servir el Método es la menopausia, porque aminora los síntomas no deseados como los sofocos, incomodidad vaginal o la depresión. Y puede ser una forma de “florecer por segunda vez” para las mujeres en este período. Además, los ejercicios pueden atrasar el desarrollo de osteoporosis.

Otros beneficios:

Mejora la circulación sanguínea de las fibras neuronales, por consiguiente, su funcionamiento se vuelve más preciso y pueden mandar el trabajo de los órganos pélvicos mejor.

Estimula el trabajo de la vejiga, uretra, algunas partes de los intestinos cerca de los órganos reproductivos (intestino delgado y colon), también el páncreas, las glándulas suprarrenales y la tiroides. 

Moldea y fortalece los músculos del abdomen, cadera, espalda baja y los músculos dentro y fuera de la pelvis, como los mú
sculos del suelo pélvico y vagina, músculos de los glúteos. Es un verdadero entrenamiento para nuestro cuerpo. 

Compensa la alteración del equilibrio hormonal y nervioso a causa del estrés, por eso libera la tensión y da bienestar físico y emocional.

Sin embargo, con todos los efectos beneficiosos para nuestro organismo, en mi experiencia, el más destacable de ellos es empezar a aceptar y respetar nuestro cuerpo y con el tiempo ser capaz de amarlo.

Los movimientos son moderados y fáciles de aprender. Primero se ven detalladamente en un taller de 4 horas. Después, la práctica regular (dos o tres veces a la semana) dura 30 minutos. Cuando ya conozcas los movimientos, podrás practicar en casa o bien participar en las clases regulares.

Adrienn Beliczky
Método Aviva®
www.vidaviva.eu/es
info@vidaviva.eu

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